La golpiza que le propuso la vida dio como resultado un disco abrazador de dance pop que habla, precisamente, de ruptura y resistencia.
En su primer disco, This Time, destacó en la escena electro pop y comenzaron a invitarla a giras y festivales como Bumbershoot y Bonnaroo.
Todo iba bien y se estaba preparando su segundo álbum Lighter, había sido telonera de Lewis Capaldi y King Princess, pero la pandemia transformó un camino claro y seguro, en una maraña de indefiniciones y poca claridad.
Donna alcanzó a publicar un EP con Harvest, pero la relación con la disquera comenzó a depreciarse hasta que rompieron contrato el año pasado, lo que la llevó a una grave depresión y una crisis financiera que la obligó a vivir en su coche.
El mánager que había tenido desde el principio también dejó de trabajar para ella pues la disquera ya no le pagaba, así es que se sintió completamente sola.
“Fue un momento muy, muy aterrador”, comentó en entrevista con Caitlin White de la revista Spin. “Me quedé en mi coche sola, con la vergüenza de seguir pidiendo ayuda a los que me rodeaban. Es una experiencia bastante común cuando estás en lo más bajo, que incluso si tienes sistemas de apoyo, estar demasiado avergonzado para apoyarte en ellos”.
“Estaba en un lugar realmente aterrador, me deprimí mucho. Perdí mi sentido de la identidad y dónde encajaba en la vida que creía haber creado para mí”
Donna Missal
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Pero este 2023 todo pinta brillante para esta talentosa artista con la salida de su nuevo disco de forma independiente.
La historia de Revel
Mientras su vida era un caos, Missal conectó con algo espiritual, necesitaba ese lugar donde pudiese encontrar algo de paz. Eso se refleja en la mayoría de las canciones del nuevo disco.
Cuando tuvo ya armada la maqueta, Donna comenzó a enviar a sus contactos y a varias disqueras su material, el cual fue bien recibido y las cosas comenzaron a cambiar y logró tener los fondos suficientes para grabar el disco.
Revel es un disco que vio, por fin, la luz el 16 de junio. Fue grabado de forma intermitente en distintas laptops, en distintos dormitorios y encontrando espacios de estudio a deshoras.
Sin embargo, tras la penuria de grabar un disco de esa manera, obligó a Donna a explotar su todo su potencial y a reconocer sus capacidades. Redefinió sin duda su proceso musical.
Entre más adelantaba, más grababa y más escuchaba sus nuevas canciones, le ayudaron a ir saliendo de la oscuridad en la que se encontraba.
Hoy, su música ha evolucionado a un dance pop melodramático y teatral, ya no se escuchan esos sonidos de su Lighter que nos recordaban a Adele o a Florence and the Machine.
Donna describe su disco como un álbum de dolor, pérdida y superación, pero con ritmos bailables y pop energético. El primer sencillo “Flicker”, demuestra precisamente eso.
Todo el disco está lleno de sensaciones sanadoras, es un pop sintético que por más triste que sea la historia, te pone de buenas.
“Ahora miro hacia atrás y me doy cuenta de que fue un cúmulo de emociones y de luchas, y me siento más fuerte que nunca. Estoy muy orgullosa de ello. De esa experiencia trata realmente este álbum”.